Expedición Botánica: Ciencia e Ilustración

Category: Historia de Colombia

Carlos Linneo
Pierre-Narciso Guérin. Retrato alegórico de Carlos Linneo. Grabado por Acorie Baron y Pedritt. Colección J.A. Amaya, Bogotá.

Los grandes descubrimientos científicos de los siglos XVII y XVIII y los aportes de los teóricos del racionalismo hicieron que monarcas y filósofos manifestaran una pasión notable por las ciencias, que llegaría a las colonias americanas.

Antecedentes

En el siglo XVIII, o “Siglo de las Luces”, la conquista de las ciencias naturales se convirtió en una verdadera obsesión. Botánicos, matemáticos, químicos y naturalistas opinaban que la Ilustración, centrada en la razón y la ciencia, libraría a la humanidad de toda vinculación espiritual y de los valores tradicionales. Así, la ciencia fue considerada el único camino para descifrar los secretos de la naturaleza, llegar al conocimiento verdadero y al progreso de la sociedad.

Científicos y sociedades científicas

El mundo intelectual de la Ilustración europea encauso sus investigaciones en la naturaleza. Por esa razón tuvieron gran divulgación los estudios sobre la clasificación de las plantas del sueco Carlos Linneo, la “Historia Natural” del Conde de Buffon y los estudios naturalistas de abate Antoine Pluche. Durante estos años se estudiaron los “Principios de botánica” de Bernades, se conocieron “La física de los árboles” y el “Tratado de las siembras y plantas de árboles” de Duhamel de Monceau, obras que encauzaron los programas educativos contra la tala de bosques. Se revivieron las tesis de Galileo, Newton, Descartes, Bacon y otros.

 

Conde de Buffon  Georges Louis Leclerc, conde de Buffon (Montbard, 7 de septiembre de 1707 – París, 16 de abril de 1788), pertenecía a un círculo de científicos franceses que abogó por lo que entonces era la nueva ciencia newtoniana, una visión mecánica del mundo que sostenía que la materia en movimiento operado por fuerzas naturales como la gravedad, podría explicar todo lo que se observa en la naturaleza.


Se despertó en Europa un gran interés por los estudios de la química, la física y las matemáticas. Fueron muy divulgadas las obras del abate Nellet sobre la física experimental y “El espectáculo de la naturaleza” del abate Pluche, que deleito a los europeos por el sentido práctico de sus experiencias. Durante estos años se fundaron también numerosas academias científicas, sociedades y escuelas  para los estudios naturales como la Academia de Ciencias de París, la Real Sociedad de Londres, la Sociedad Real de Copenhague, la Escuela de Matemáticas de Barcelona, la Sociedad Médica de Sevilla y diversas sociedades de Amigos del País en España que dedicaban muchas de sus actividades a los estudios naturales.

En consecuencia, en las colonias americanas se crearon importantes instituciones científicas como la Expedición Botánica en el Nuevo Reino de Granada, el Real Colegio de Minería en México, y las Sociedades de Amigos del País en Lima y la Habana. Así mismo, se destacaron personajes como José Celestino Mutis y Francisco José de Caldas en el Nuevo Reino de Granada, Francisco Eugenio de Santacruz y Espejo en Quito, Hipolito Unanue Pavón en Perú, Juan Ignacio Molina en Chile y Francisco Javier Clavijero en México.

José Celestino Mutis José Celestino Bruno Mutis y Bosio (Cádiz-España 6 de abril de 1732 - Santafé de Bogotá, 11 de septiembre de 1808) Médico y botánico español que figura entre los más destacados iniciadores del conocimiento científico en el Nuevo Mundo. Se ordeno como sacerdote para “mejor servir a Dios y a la ciencia” llegó al Nuevo Reino de Granada como médico del virrey Pedro Messía de la Cerda.

El papel de la agricultura y la medicina

El interés por los estudios naturales estaba relacionado también con la crisis del mercantilismo y la escasez de metales preciosos, debido al agotamiento de las minas de oro y plata en las colonias americanas. Fue entonces cuando los estadistas económicos plantearon la necesidad de aprovechar más los recursos naturales y de hacer de la agricultura el nuevo eje de la economía mundial, algo que los fisiócratas ya habían propuesto. El economista francés Quesnay defendió la idea de que la agricultura debía tener una función más importante en la economía mundial, de allí la necesidad de explotar los recursos naturales y fomentar la agricultura, la industria y el comercio.

La medicina se convirtió en la ciencia de la modernidad en España y sus colonias, pues fueron los médicos quienes introdujeron las nuevas ideas cartesianas y los adelantos de los naturalistas europeos. Se fundaron escuelas de medicina y se hicieron numerosas campañas de vacuna contra la viruela. Así mismo, se estimularon los estudios sobre plantas medicinales, alimenticias e industriales y se auspiciaron expediciones botánicas, científicas y sociedades de Amigos del País para el fortalecimiento de la economía española y las colonias americanas.

Las expediciones científicas y los viajeros

En el siglo XVIII llegaron varias misiones científicas a tierras americanas.  A través de ellas se manifestó el interés de algunos gobiernos europeos en la adquisición de materias primas para sus productos industriales y en el estudio de los atributos medicinales o alimenticios de las plantas desconocidas. Ya desde el siglo XVII habían venido a América varios científicos europeos, principalmente botánicos y mineralógos que se interesaron por los recursos naturales del Nuevo Mundo: Charles Plumier, Juan Sloane y Jorge Macgrave, junto con el médico Guillermo Piso, investigaron en Brasil, y Luis Feuillé, quien visito Santa Marta y Cartagena. En la segunda mitad del siglo arribaron las misiones de La Condamine, los viajeros Juan y Antonio de Ulloa, Nicolás Joseph Jacquin, Louis Antoine Bouganville, Joan Francois de Galaup, Alejandro Malaspina, Juan José Fausto Elhuyar y los sabios Amadeo Bonpland y Alejandro de Humboldt.

Amadeo Bonpland y Alejandro de Humboldt
Humboldt y Bonpland en una choza en el Orinoco. Grabado coloreado de H. Lademann, sobre dibujo de Otto Roth, 1870. Preussischer Kulturbesitz, Berlín.

El viaje científico de Alejandro Humboldt

Este alemán recorrió las bocas del río Orinoco hasta Santafé, las montañas del Quindío, Popayán, Quito, las costas del Pacífico y México. Su obra recoge sus observaciones científicas en América y fue publicada en 30 volúmenes, algunos de los cuales son “Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente realizado de 1799 a 1804”, “Plantas equinocciales” , “Observaciones astronómicas”, "Operaciones trigonométricas" y “Ensayo político sobre el Reino de Nueva España”, fue el primer viajero del mundo que investigo el magnetismo terrestre. Además, hizo observaciones fitogeográficas y mediciones altimétricas y geofísicas. Sus estudios tuvieron alta difusión en el mundo científico y sus ideas influyeron decisivamente en los criollos americanos que llevaron a cabo la Revolución e Independencia.

Humboldt  Friedrich Wilhelm Heinrich Alexander Freiherr von Humboldt (Berlín, Alemania, 14 de septiembre de 1769 - 6 de mayo de 1859), mejor conocido en español como Alejandro de Humboldt, fue un polímata: geógrafo, astrónomo, humanista, naturalista y explorador alemán. Es considerado el «padre de la Geografía Moderna Universal».

La Expedición Botánica en el Nuevo Reino de Granada (1783-1816)

Fue la institución científica más importante en nuestro territorio durante la segunda mitad del siglo XVIII. A través de ella, y de su interés por el conocimiento de la naturaleza neogranadina, penetró el pensamiento ilustrado en el virreinato. Su creador e impulsor fue José Celestino Mutis, quien llegó en 1760. En 1762 estableció la primera cátedra de matemáticas en el Colegio Mayor del Rosario en Santafé, en el cual dio a conocer física de Newton y la astronomía copernicana. Con el apoyo del arzobispo-virrey Antonio Caballero y Góngora se creó en el año de 1783 la Expedición Botánica, bajo la dirección de Mutis.

Campamento de la Expedición Botánica
Ilustración de los campamentos donde se realizó la Expedición Botánica

La Expedición Botánica hizo inicialmente sus investigaciones botánicas, zoológicas, mineralógicas en Mariquita, porque se pensaba que en esta región estaba representada la vegetación de todos los climas. En 1791 se trasladó a Santafé, en donde se consagró la investigación y descripción científica de la naturaleza neogranadina. Estudió la flora septentrional de América del Sur hasta la línea equinoccial y realizó observaciones geográficas. Recogían plantas que catalogaban, luego buscaban sus propiedades y las dibujaban en láminas en colores o en tinta negra para ilustrar los textos científicos.

Herbario

Muestra de láminas dibujadas en la Expedición Botánica

La expedición investigó numerosas plantas, minerales y animales del área tropical, clasificó y organizó el herbario con más de 20 mil plantas. Realizó investigaciones sobre la quina, la ipecacuana, el guaco, el árbol del bálsamo de Tolú, el árbol del bálsamo del Perú, la yerba del Thé, la yerba cuzparia, el bálsamo de rubio, el aceite de María y muchos otros, e hizo numerosas monografías de plantas. También investigó las causas de las mareas atmosféricas e hizo investigaciones geográficas, botánicas y astronómicas. Mutis mantuvo correspondencia permanente con varios sabios naturalistas europeos como Linneo, Le Blond y Alejandro de Humboldt.

Miembros de la Expedición Botánica

 
Francisco José de Caldas  Francisco José de Caldas es considerado el primer científico colombiano. Nació en Popayán en 1768. Termino sus estudios de Derecho en el Colegio Mayor del Rosario y luego perfeccionó sus estudios de botánica, física y astronomía. En 1805 fue invitado a hacer parte de la Expedición Botánica y a dirigir el Observatorio Astronómico. En 1808 fundó y dirigió el periódico científico “Semanario del Nuevo Reino de Granada”. Participó en la revolución política del 20 de julio de 1810, cuyos hechos fueron narrados en el periódico “Diario Político de Santafé”. Fue federalista en la Primera República Granadina. En la reconquista española fue hecho prisionero en la batalla de la Cuchilla del Tambo. El Consejo de Guerra lo condenó a muerte y lo hizo fusilar en Bogotá, el 29 de octubre de 1816. 

En el ambiente de esta expedición científica se formaron algunos de los que llegarían a ser protagonistas de la Revolución de Independencia. Entre sus integrantes estaban el presbítero Eloy Valenzuela nombrado segundo director de la expedición, Francisco José de Caldas, Francisco Antonio Zea, Sinforoso Mutis, José Félix Restrepo, Jorge Tadeo Lozano, Miguel Pombo, Joaquín Camacho, Pedro Fermín de Vargas, Fray Diego García y José María Carbonell, sus directores eran Francisco Javier Matiz y Salvador Rizo. Entre los pintores se destacan Pablo Antonio García, Pablo Caballero y Antonio Cortés. Todos ellos estaban convencidos de que en las ciencias naturales se encontraba el instrumento más adecuado para transformar la realidad económica y lograr el progreso de la sociedad.

 Presbítero Eloy Valenzuela  Presbítero Eloy Valenzuela Francisco Antonio Zea Francisco Antonio Zea José Félix de Restrepo José Félix de Restrepo Jorge Tadeo Lozano Jorge Tadeo Lozano
Miguel Pombo Miguel Pombo Joaquín Camacho  Joaquín Camacho Pedro Fermín de Vargas  Pedro Fermín de Vargas Francisco Javier Matiz  Francisco Javier Matiz
 
Referencia:
Nuestra Historia. (2012). Casa Editorial El Tiempo.